El mercadillo ambulante abrirá a partir de este jueves en San Clemente

San Clemente poco a poco recupera la normalidad, dentro de un estado aún de vigilancia y prudencia, pero este jueves, 21 de mayo, el Ayuntamiento volverá a abrir el mercadillo ambulante que se celebra los lunes y jueves. Un mercado que se celebra desde tiempos de Isabel la Católica, en 1476, quién otorgó a la Villa el Privilegio Real para celebrar un mercado franco libre de impuestos  y alcabalas en cada jueves de cada semana.

El coronavirus motivó que los mercados se viesen cerrados, como muchos comercios. En total son 72 los puestos que habitualmente venden en la localidad, venidos de las provincias de Cuenca, Albacete y Ciudad Real, y a los que se aplicó la exención del 50 % de la tasa reguladora por la venta ambulante, correspondiente al año 2020. Una medida económica para ayudar al sector, a los que además no se les cobrará tampoco los días correspondientes al Estado de Alarma.

Será este jueves cuando el mercadillo se retome, de nuevo, pero con algunas limitaciones y determinadas restricciones según especifica la orden del Ministerio de Sanidad SND/386/2020, de 5 de mayo, que viene a flexibilizar algunas restricciones sociales y de desarrollo del comercio minorista. La venta será exclusiva del comercio minorista y de productos de primera necesidad: frutas, verduras, conservas, encurtidos… por lo que quedan, de momento, fuera los puestos de ropa, flores, enseres…

La apertura se hace siguiendo todas las recomendaciones sanitarias y de higiene, así como de distanciamiento social, es por ello que se ha establecido una reorganización de los puestos. Se contará con control de acceso a vendedores y todo usuario que quiera comprar, con un horario de 8 a 14 horas. La distancia establecida entre los puestos será de 10 metros frontales y 3 metros laterales, con una zona de tránsito para entrada y otra para salida, marcadas y especificadas. Los clientes no podrán tocar los productos y entre clientes deberán guardar la distancia de 2 metros y los vendedores también deberán estar a 2 metros, respecto de los clientes, que deberán además llevar, guantes y mascarillas.

La limpieza también será más exhaustiva de lo habitual y se requiere que los puestos sean limpiados con frecuencia y al finalizar la jornada.

Será la Policía Local quien vele porque se cumplan estas medidas, aunque desde el Consistorio están convencidos que los sanclementinos respetarán las medidas establecidas por el bien de todos.